El Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA) ha llamado a todos los estados que componen la ONU para que inviertan en la salud de las mujeres, pues se estima que la mortalidad materna continúe aumentando.
Declaración en ocasión del Día Mundial de la Población 2009
Por Thoraya Ahmed Obaid, Directora Ejecutiva del Fondo de Población de las Naciones Unidas, UNFPA
Hoy, en momentos en que conmemoramos el Día Mundial de la Población, la crisis económica y financiera mundial amenaza con hacer retroceder los adelantos tan arduamente logrados en los países en desarrollo en materia de educación y salud. Entre las personas más gravemente afectadas están las mujeres y las niñas. Por esa razón, el tema del Día Mundial de la Población se centra este año en las inversiones en la mujer. Incluso antes de la crisis, las mujeres y las niñas constituían la mayoría de los pobres del mundo. Ahora se están sumiendo cada vez más en la pobreza y enfrentan crecientes riesgos de salud, especialmente si están embarazadas.
Actualmente, las complicaciones del embarazo y el parto son las principales causas de muerte de la mujer en el mundo en desarrollo; y la mortalidad derivada de la maternidad representa la mayor iniquidad del mundo en lo que respecta a la salud. Esta deficiencia en la salud se ha de agravar sin lugar a dudas, a menos que aumentemos las inversiones sociales, conservemos los adelantos logrados en la salud y ampliemos las medidas para salvar más vidas de mujeres.
En los países y las comunidades donde las mujeres tienen acceso a servicios de salud reproductiva —como planificación de la familia, atención del parto por personal calificado, atención obstétrica de emergencia y atención del recién nacido— las tasas de supervivencia son altas y las defunciones de madres y recién nacidos son infrecuentes.
El acceso a los servicios de salud reproductiva, en particular los de planificación de la familia y salud materna, ayuda a las mujeres y las niñas a evitar embarazos no deseados o precoces, abortos realizados en malas condiciones y discapacidades causadas por el embarazo. Esto significa que las mujeres mantienen un mejor estado de salud, son más productivas y disponen de más oportunidades de educación, capacitación y empleo, lo cual, a su vez, beneficia a familias, comunidades y países.
Y las inversiones en salud reproductiva tienen buena eficacia en función de los costos. El valor de una inversión en servicios anticonceptivos puede multiplicarse por cuatro —y a veces, muchísimo más en el largo plazo— al reducir la necesidad de efectuar gastos públicos en salud, educación y servicios sociales de otros tipos. Según se estima, solamente con servicios de planificación de la familia sería posible reducir la cantidad de defunciones maternas en hasta un 40%.
Actualmente, nuestro mundo es demasiado complejo y está demasiado interconectado como para plantear los problemas de manera aislada y sin relaciones recíprocas. Cuando una madre pierde la vida, cuando un niño huérfano no recibe los alimentos o la educación que necesita, cuando una joven crece para tener una vida sin oportunidades, las consecuencias son de mayor alcance que la existencia de esas personas; menoscaban a la sociedad en su conjunto y reducen las posibilidades de paz, prosperidad y estabilidad.
El UNFPA, Fondo de Población de las Naciones Unidas, sigue comprometido a apoyar a los países para que promuevan la ampliación de los medios de acción de la mujer, la igualdad entre hombres y mujeres, y la salud sexual y reproductiva.
Hoy, en el Día Mundial de la Población, exhorto a todos los líderes a que conviertan la salud y los derechos de la mujer en una prioridad política y de desarrollo. Las inversiones en las mujeres y las niñas prepararán el terreno no sólo para la recuperación económica, sino también para un crecimiento económico a largo plazo que reduzca la falta de equidad y la pobreza. En estos tiempos difíciles, no hay una inversión más inteligente.
Está muy interesante el arículo, los hombres debemos pensar que la mujer es lo mas precioso que se tiene en el mundo, de ellas nacemos y por ellas tenemos nuestros hijos.
Estoy de acuerdo que todos los países que conforman la ONU pongan su granito de arena para proteger a la mujer en cualquier estado.
yo estoy aprendiendo de cuidar a mis hijos, promuevo que debemos ayudar más a la mujer y los hombres encargarnos de los niños mientras ella descansa.