Feeds:
Entradas
Comentarios

Archive for 27 de febrero de 2010

Por Osvaldo Rojas Garay

Freddy Asiel Álvarez

 Freddy Asiel Álvarez.
Foto: Carolina Vilches Monzón

Atrás quedó la etapa clasificatoria con la conquista del último boleto por parte de Santiago de Cuba. Ahora viene lo mejor de la XLIX Serie Nacional de Béisbol, al iniciarse este sábado la fase de postemporada.
Cienfuegos frente a La Habana —monarca defensor— y Sancti Spíritus-Industriales tendrán a su cargo el comienzo de los cuartos de final en el occidente del país.
Mañana, entrarán en acción los otros cuatro involucrados en la disputa del título. El estadio Sandino será escenario del primer partido del gran clásico oriental entre Santiago de Cuba y Villa Clara, a partir de la 1:15 p.m. Antes, a la 1:00 p.m., Guantánamo y Ciego de Ávila empezarán su porfía en el “Van Troi”.
El tope de los colosos del Este debe reservarnos un duelo de mundialistas entre Norge Luis Vera y Freddy Asiel Álvarez, si se mantiene lo que nos comentó el entrenador de pitcheo de los anaranjados, Ronni Aguiar, quien al sustentar la decisión de abrir con el derecho de Sierra Morena afirmó: “aunque no tuvo una buena temporada en balance de ganados y perdidos (3 y 10), consideramos que sigue siendo nuestro principal lanzador.
Freddy, acumula de por vida, 4 victorias y 2 fracasos frente al seleccionado indómito. Tres de esos éxitos los logró en el 2009, cuando resultó el Caballo de Batalla en el éxito alcanzado por los anaranjados ante las avispas  en cuartos de final.
Entretanto, Vera archiva balance de 15 y 9 contra los villaclareños, aunque en postemporadas la cuenta es más estrecha, 8 y 7.

Read Full Post »

Por Osvaldo Rojas Garay
Foto: Cristyan González Alfonso

v-mesa-aguilas-cga-5.JPG

No hubo mucho tiempo para conversar lo que hubiéramos querido, pero algunas palabras logramos arrancarle a Víctor Mesa.
Ahora, en lugar del uniforme anaranjado, viste la camiseta roja de las Águilas de Veracruz, combinado de la Liga Mexicana de Béisbol, que dirige junto a su coprovinciano Víctor Figueroa; Jorge Hernández, Agustín Marquetti y Pedro José Rodríguez Jiménez, dos otroras estrellas de nuestra pelota como él.
En su primera visita a Cuba, el equipo realizará varios juegos de preparación para la temporada que comenzará en su país a mediados de marzo. El inicio de estos topes  marcó una contundente derrota de 0 a 12 frente al elenco de Villa Clara.
«Acabamos de comenzar el entrenamiento y en este encuentro no utilizamos a nuestros mejores lanzadores. Para estos jugadores será una interesante experiencia chocar con equipos cubanos.
«Aunque no estamos todavía en forma, es un juego que resulta provechoso en la preparación de Villa Clara para el play off contra Santiago de Cuba», declaró Víctor.
Sobre las características del elenco que dirige, el mejor jardinero central de nuestras series nacionales confesó: «Es un equipo con peloteros no tan rápidos. Su juego es más lento que el de aquí.»
Mesa comentó que en las últimas semanas pudo de alguna manera estar al tanto del desempeño de sus ex pupilos villaclareños: «Si mantienen el ritmo de juego que desarrollaron en la temporada, pueden ganar el campeonato», puntualizó.
Las Águilas no han logrado coronarse desde 1970 cuando los dirigió el cubano Enrique Izquierdo.
Curiosamente los cinco títulos de este equipo han sido con timoneles cubanos, pues Agustín Verde los llenó de gloria en 1937 y 1938 y Santos Amaro en 1952 y 1961. ¿Será una buena señal para Víctor? 

Read Full Post »

Por Osvaldo Rojas Garay

avispa-naranja.JPG

Cuando parecía que quedaría fuera de una postemporada por tercera vez, Santiago de Cuba demostró su clase, y con un levantón en la recta final se embolsilló el último boleto disponible para la fase decisiva de nuestro béisbol.
Así quedó planteado una vez más el eterno dilema de la zona oriental sobre qué suena más alto, la conga santiaguera o el rucurrucu a Santa Clara.
Son los equipos que más se han enfrentado en series nacionales (237), incluyendo, por supuesto, los 67 partidos que han escenificado en play off, también cifra récord.
La cuenta de por vida favorece a los indómitos de Antonio Pacheco, que se han impuesto en 129 oportunidades por 108 los anaranjados de Eduardo Martín; sin embargo, los villaclareños han sido superiores a los montañeses en duelos de postemporada, en los que acumulan ventaja de 36 satisfacciones ante 31 descalabros.
El play que arrancará mañana en el «Sandino» será el número 12 entre los colosos del Este. Villa Clara ha dominado 8 veces por 3 a sus calificados oponentes.
Los actuales subcampeones salieron airosos en las semifinales de las contiendas de 1992-1993 (4-1), 1993-1994 (4-2), 1995-1996 (4-2), 1996-1997 (4-2) y 2003-2004 (4-3), así como en los cuartos de finales de 2002 (3-1), 2002-2003 (3-2) y 2008-2009 (4-3).
Entretanto, las avispas triunfaron en las discusiones del banderín oriental correspondiente a las versiones de 2004-2005 (4-0), 2006-2007 (4-3) y 2007-2008 (4-2). Nunca han ganado en cuartos de final.
Me pregunto cuántos títulos computaría Santiago de Cuba de no haber enfrentado tantas veces a los anaranjados, sus únicos vencedores en las postemporadas de la franja oriental. ¿Lo dudan? Fíjense que cuando los indómitos conquistaron tres coronas de pegueta (1998-1999, 1999-2000 y 2000-2001) no encontraron a los villaclareños en su camino.
Por otra parte, en las tres ocasiones en que eliminaron a los nuestros terminaron apoderándose del gallardete.
Este domingo comenzará a escribirse otro capítulo del gran clásico oriental. Villa Clara llega hasta aquí tras haber sido, después de Sancti Spíritus, el segundo equipo más triunfador de la serie con 56 sonrisas, que iguala su cuarta mayor cifra en un torneo.
La ofensiva exhibió su average más alto (310) desde que en la versión de 1997-1998 se puso en práctica el formato de 90 desafíos. Y eso que en las últimas semanas los jugadores de casa no disfrutaron de las bondades del bate de grafito, según me confesó el mentor Eduardo Martín.
La defensa, sin llegar a la excelencia de campañas pasadas, promedió 976, con 85 errores, 15 menos que en el certamen anterior.
El pitcheo ocupó el tercer puesto con 4,02 promedio de carreras limpias, a lo cual se le añade que fue el segundo cuerpo de lanzadores al que menos le batearon (273).
Entre el zurdo Robelio Carrillo (7 y 3), el olímpico Luis Borroto (9 y 1) —líder en ganados y perdidos—, Yosvani Pérez (8-2) y Yuliet López (7-2) acumularon 31 victorias con 8 descalabros, balance muy superior al saldo de 14 y 20 que presentaron en el pasado campeonato. Los tres primeros acompañarán a Freddy Asiel Álvarez (3-10) en la rotación de abridores.
En cuanto a Santiago de Cuba, su principal fortaleza volvió a ser la ofensiva, que finalizó con average de 308, con 114 bambinazos, mientras que la defensa promedió 972 y el pitcheo 5,12.
Pienso que en este último renglón estarán las mayores preocupaciones de Pacheco, quien se apoyará en el estelar Norge Luis Vera —máximo triunfador en play off con 32 y 11—, Danny Betancourt, Osmel Cintra, Alain Delá y Alberto Bicet , un relevista que ha actuado frecuentemente como abridor en la presente serie.
Estadísticas en la mano,  Villa Clara parece favorita, pero un play off, como ellos mismos demostraron en 2009, es harina de otro costal.
No basta con sobresalir en la etapa clasificatoria. Aquí es borrón y cuenta nueva, y tratándose de Santiago de Cuba, no siempre crea usted totalmente en los números. Recordemos aquella contienda de 1998-1999 en la que fueron los únicos que no ganaron 50 juegos (46 y 44) entre los clasificados y terminaron de campeones frente a Industriales, el más triunfador de la justa con 58 salidas exitosas. 

Read Full Post »

Juan Carlos Recio publicó en su blog Sentado en el Aire un artículo sobre La pupila insomne que por interesante, amena y autobiográfica también quiero tener en VerbiClara:

LA PUPILA INSOMNE

La pupila insomne

Tengo el impulso torvo y el anhelo sagrado
de atisbar en la vida mis ensueños de muerto.
¡Oh la pupila insomne y el párpado cerrado!..
(¡Ya dormiré mañana con el párpado abierto!)…

Tuve buenos maestros en mi niñez hasta la Secundaria y Pre-universitario, de geografía, historia, y literatura principalmente. Fue antes, mucho antes de que les llamaran emergentes u otra cosa que sonara impersonal. Ellos, no escaparon a cierta forma de consigna, les era imposible, pero en una buena parte, fueron sustancialmente provechosos; y aunque nunca les dije algún agradecimiento por esa ganancia, tampoco los traté con otro apodo que no reverenciara su trabajo.

 poeta-leyendo.jpg

Tengo una hermana de nombre Esther, que nunca le gustó la escuela y siempre iba descalza por un palmar en la zona del campo donde vivíamos, iba hasta una presa cercana a recoger flores de patos chinos y escribía en los troncos el nombre de su enamorado de turno y recitaba siempre un poema nuevo, aprendido de pronto entre su arranque amoroso y su deseo silvestre de hablar con el viento. Esther mezclaba poemas de muy diferentes estilos y autores, por ella, supe antes que nadie, de los sonetos de Nicolás Guillén, sin que se me hiciera un ruido de héroe, poeta nacional, o toque de rumba. Con ella supe de la música de esa zona para mí desconocida del poeta con todas sus flores de abril. Fue mi hermana quien recitó, ante una de las palmas y en solemne homenaje a su primer amor perdido La casada infiel, de Lorca, y luego cuando demoraban sus días tristes por alguna esperanza o promesa de amor que no se declaraba, escuché, que a ella, como a César Vallejo, le dolían los huesos como si se hubiesen quedado mucho tiempo a la intemperie bajo la lluvia; o cuando perdió su virginidad, lo supe por esos versos de Martí, donde una niña se ahoga en su pena. También escuché de Góngora, de La
Avellaneda, Rubén Darío de Heredia cuando la llamaban y ella tenía que alejarse de
su patria de palmas.

Sin olvidarse claro de recitarme cada cierto tiempo, aunque el calor del mediodía nos apedreara, Veinte poemas de amor y una canción desesperada, porque ella con frecuencia también tiritaba como un astro.

Fue por mi hermana, a la que miro ahora desde una foto de hace 20 años, la primera que me enseñó a pensar en el valor de la poesía, en el sentido de la vida, aunque a veces entre boleros de Portillo de la Luz y algunos poemas de Buesa, mi hermana se quedaba ausente como una patria mal iluminada, y yo, cogedor de yeguas al fin, me escapaba al monte con desgano.

Un día, cerca de un arroyo ella me habló de La Pupila Insomne, y no recuerdo ante cuál palma, pero me dijo que se sentía más enamorada de Rubén Martínez Villena, que de su novio; en ese entonces no sabíamos ni mi hermana ni yo, sobre la carta pública en respuesta al artículo Nuestro Rubén, de Jorge Mañach, por la ironía de este último al desvalorizar su poesía y compararlo con Rubén Darío; carta donde el poeta le dijo al crítico «Yo destrozo mis versos, los desprecio, los regalo, los olvido: me interesan tanto como a la mayor parte de nuestros escritores interesa la justicia social».

Y ahora, (porque según mi hermana, al hacerle referencia sobre este post, me recuerda lo que me contó aquella tarde con sus ojos del amor que le suena lejano, se enamoró de su gallardía —y no es leyenda sino la historia de mi hermana—, que comprendió al poeta que prefería anteponer su deber a la Patria, que a sus metáforas. Y ella, tan justa y social, también lo reconocía y escribió en una de las palmas su nombre como si lo hiciera con letras de oro.

Mi amigo Arístides Vega Chapú me ha acaba de regalar, entre otros libros, La pupila
insomne (editado en el 2008, por la Casa Editora Abril), me reencuentro al poeta, ya no me llega de la voz de mi hermana y su actitud solemne de recitadora ante el palmar de su locura, y al igual que con los sonetos de Nicolás Guillén, he volcado junto a él, como una furia que no ciega, un ojo avizor de quién descubre con certera claridad y buen apetito; muy similar a aquellas cicatrices casi imborrables que mi hermana grababa de sus amores en las altas palmas. De la furia del poeta y de su autenticidad, de su solemne sentido de mirarse por dentro, de desgarrar desde su amor, el odio, por si creía verse inútil, sin que saltara ante la pólvora. Solemne, como un dedo que apunta al infinito.

Juan Carlos Recio Martínez, NY, 18 de febrero del 2010.

_______________________________

IRONÍA

Ironía

Toma, toma mi lira; quiero darte,
como recuerdo de mi fe pasada,
esta lira infeliz que fue mi espada
y que fue mi broquel y mi estandarte.

Póstuma ofrenda de mi inútil arte,
la dejo ante tus pies abandonada,
aunque a golpes tu planta idolatrada
con ofendida majestad la aparte.

(más…)

Read Full Post »