Cuando me llames
vendré a ti
como las hojas de ginkgo amarillentas
flotan en el viento del otoño.
Cuando me llames
vendré a ti
como la luna nueva hundiéndose en silencio desaparece
en la noche, mientras la niebla desciende sobre el lago.
Cuando me llames
vendré a ti
como el sol en la temprana primavera penetra en la hierba
cuando cantan las garzas blancas en el cielo azul.
Traducción: Germain Droogenbroodt – Rafael Carcelén
* Corea, 1907-1974