
Pintura de Leonid Afrémov.
el verano hace soñar
los recuerdos
días atrapados en la ventisca de la nocche
somnolienta la palabra se ata al cuerpo
que cargamos junto con ella sin certeza de lo que sucede
¿dónde ir con los destellos?
¿es necesario el viento para soñar?
¿acaso es esto lo que necesito para estar aquí?
¿quién soy en medio de este desierto que agita?