Por Alexis Castañeda Pérez de Alejo
Han pasado ya varios días, pero solo ahora puedo anotar estas emociones. Ha muerto Rosita, así simplemente: Rosita, la querida vecina de El Mejunje, en Santa Clara. Nunca supimos su apellido, pero no hacía falta, la queríamos igual, siempre solidaria, cálida y comprometida.
Los habituales de este espacio, sus trabajadores todos, la fuimos entrañando, ya era parte de nuestro paisaje físico y espiritual, sentada en su sillita plegable, escogiendo siempre la orilla, el rincón menos visible, para no molestar el trascurrir artístico.
Las peñas de boleros y filin, los show de transformismo, la tenían como espectadora segura, más de una canción, un espectáculo, un homenaje se le dedicó. Nunca faltaron manos y corazones para acompañarla, ya tarde hasta su casa. (más…)